28.4.13

And she will be loved, chapter 45.



-Angie-
París, la ciudad del amor. Irónico, ¿verdad? Estoy en la ciudad del amor tras haber perdido al chico que quiero, por su estupidez o la mía. Eso aún no lo sé, no dejo de torturarme a mi misma con el hecho de que quizás simplemente debería haberle perdonado sus celos. Si hubiera hecho eso, quizás todo estaría bien.
Nicole, Fredo y Justin intentan animarme, pero no es nada fácil. Justin está en su mala racha otra vez, vuelve a pasarlo mal. Nicole está bajo muchísima presión, ya que si las actuaciones de voz de Justin no son perfectas, el montaje debe serlo. Fredo está muy pendiente de Justin, ya que si Justin se hunde estamos perdidos. Todos nosotros.
-Angie, vístete.- me dice Justin saliendo del baño, ya vestido tras haberse duchado. Hemos dormido juntos las últimas noches, aunque en realidad ninguno de los dos duerme demasiado. Nos limitamos a tumbarnos cara a cara y a cogernos de las manos, dándonos apoyo hasta que uno de los dos se duerme, entonces el otro le abraza para intentar alejar las pesadillas. La primera noche tras la ruptura la pase en el pecho de Justin, llorando, mientras él me abrazaba y me acariciaba el pelo, susurrando palabras de ánimo. 
Levanto la vista. Llevo la sudadera de Obey que me regaló mi madre hace unos años, y unas mallas estampadas. 
-Estoy vestida.- señalo yo, apartando la atención del libro que estoy leyendo.
-Quiero decir que te arregles.- sonríe él.
-¿Para qué?
-Tú arréglate. Te espero abajo, en el hall.- dice, y acto seguido sale de la habitación. Con un suspiro, me levanto de la cama y saco http://www.polyvore.com/cgi/set?id=80439608&.locale=es. Me peino, y luego me pinto los labios de rojo. Me miro al espejo al acabar y decido que para llevar llorando demasiados días, estoy bastante decente. Salgo de la habitación tras haber cogido una chaqueta y me meto en el ascensor para ir al hall. Bajo con un chico de mi edad que no hace más que lanzarme miradas sugerentes. Paso un poco de miedo, para que mentir. Al llegar al hall, abrazo a Justin por detrás, ya que está de pie mirando la televisión del hall. Me sonríe, y me coge de la mano. Salimos por la puerta trasera para evitar ser vistos.
-Tienes que ponerte esto en los ojos.- dice, y me entrega un pañuelo. Yo sonrío, observando sus bonitos ojos, antes de ponérmelo en los ojos, y que él me lo ate. Caminamos unos diez minutos, haciendo bromas y charlando. Es la primera vez que me siento bien desde que lo dejé con Harry. No me importaría seguir así algún tiempo más. Mucho tiempo más.
Nos metemos en un ascensor, y al salir, me coloca delante de lo que parece ser una barandilla. Luego, se sitúa detrás de mi, para desanudarme la venda. Parpadeo para acostumbrarme a la luz, pero cierro los ojos de nuevo.
-Abre los ojos, tonta.- dice él, abrazándome por detrás.
Abro los ojos, para asombrarme con la bonita vista de París, desde la torre Eiffel. Lo sé porque no localizo la torre en el paisaje, y por la forma de la estructura en la que estoy. El viento suave me desordena un poco el pelo y sonrío.
-Esto es precioso.
-¿No te da la sensación de que aquí arriba eres... libre?-dice él. Yo miro a mi alrededor, sintiéndome por encima de todo.
-Sí... siento como si pudiera salir volando lejos de todo.
-Ese es el plan.- sonríe.- Ahora vamos a hacer algo que aprendí de una película española que vi con mi madre hace un tiempo.-
Saca una hoja de papel, y un bolígrafo.
-Tienes que apuntar en este papel aquello que te produzca dolor y de lo que quieras librarte. Puede ser eterno, o solo una palabra. Luego, lo quemas y lo arrojas lejos. Así... el dolor no se te queda tan dentro.- dice él, y me da la hoja. Yo asiento, y comienzo a escribir, con las lágrimas escociéndome en los ojos.
"Harry, te quise. Te quise más de lo que puedas llegar a imaginar. Te quise cada segundo de estos meses. Te quise, y creí que era para siempre. Pero no lo es, por eso, adiós."
Lo doblo, y veo como Justin enciende un mechero, y quema una esquina de la hoja. La llama consume la hoja, y yo la arrojo lejos. Observo mi amor por Harry consumirse en las llamas y el viento. Me siento mejor después de eso, y de que Justin me abrace. Nos quedamos allí mucho rato, abrazados. No puedo evitar llorar un poco, sin motivo, más bien por necesidad. Luego, bajamos en el ascensor, y me percato de que no había nadie en la torre Eiffel. Cosa de Justin, seguro. Él recibe un mensaje, y sonríe. 
-Tienes otra sorpresa esperándote abajo.
Le miro, con curiosidad. Pero en ese momento, las puertas se abren, salimos, y veo a alguien que me resulta muy familiar. 
-¡LIS!-grito, y me abalanzo contra mi prima. Ella suelta una risita, y me abraza con fuerza. Me separo, y ella me besa la mejilla, con una sonrisa permanente.- ¿Qué... qué estás haciendo aquí?-
-Me enteré de tu ruptura con Justin, y bueno... he venido a París ha estar contigo y a apoyarte todo lo que pueda. Me quedaré en BTour con vosotros hasta el 23 de este mes, cuando lleguéis a Italia. Allí, me quedaré con mi tía Diletta y con Valentina, mi prima. Hace mucho que no las veo, y voy a quedarme una semana con ellas en Italia. Luego, volveré a Los Ángeles a seguir con mi vida normal.- dice ella. Diletta y Valentina son familia de Lis, pero no por la parte que compartimos, así que son como mi familia lejana. Nunca las he conocido. 
-Eso... ¡eso es perfecto!- digo yo, sonriente. Mi prima se ríe, y me abraza de nuevo. Por fin buenas noticias para mí. 
Los tres nos vamos a cenar a un restaurante caro en París para celebrarlo, y así espantar la tristeza de Justin, y la mía. La tormenta parece amainar para ambos, con la calidez y la alegría de Lis, y la esperanza de que todo va a ir bien. 

-Narrador-
Los días en Hawaii pasan rápidamente para Kris y Liam, que disfrutan de unas mini-vacaciones románticas alejadas del mundo en general. Liam tuiteó el primer día: "Voy a tomarme un pequeño descanso con mi princesa @kristenjones. ¡Hasta pronto, mundo!" Kris, por su parte, se despidió de sus seguidores con un: "@Real_Liam_Payne me ha secuestrado para llevarme a un destino desconocido. ¡Hasta pronto!" Después, ambos apagaron los móviles y los dejaron en el fondo de la maleta. 
-Me quedaría aquí para siempre.- suspira Kris. Ella y Liam están acurrucados en el inmenso sofá, observando el mar por la cristalera que está en frente de ellos. Liam se inclina hacia ella, y deposita un beso en la frente de ella.
-Volveremos aquí pronto.- promete él.
-¿Cuándo? Tu te vas de gira, y yo.... a Londres.- susurra ella. No le apetece volver a estar sola en Londres, otra vez.
-Pronto, amor.- zanja Liam.- Además, tu no te vas a Londres.-
Kris se incorpora levemente, creyendo haber escuchado mal lo que su novio acaba de decirle.
-¿Cómo que no me voy a Londres?
-He hablado con Paul.- dice él, misterioso.
-No entiendo nada, Li.- suspira ella.
-Ayer llamé a Paul, y le conté todo. Estaba bastante enterado, ya que Harry ha vuelto de Barcelona.- dice Liam, y coge aire.- Angie y él lo han dejado. Y bueno, ahora está todo arreglado.-
-¿Qué está arreglado? ¡No entiendo nada!- exclama ella, frustrada.
-Te vienes conmigo a Estados Unidos. ¿Crees que voy a permitir que te vuelvas tú sola a Londres, a sufrir?- ríe, apartándole un mechón rebelde de la cara.- Créeme que no, cielo. Y si lo creías, me conoces muy mal.-
-¡Dios mío, Liam!- exclama ella, con una sonrisa en la cara.- Pero... ¿y la revista?-
-Eso también está arreglado.- dice él.
-No... no sé como puedo agradecerte todo lo que haces por mi.- dice Kris, emocionada. Liam sonríe, y le acaricia la barbilla.
-De ninguna manera, cariño. Lo hago porque te quiero. Siempre lo haré, ¿vale?- susurra. Kris se lanza a por los labios de él, que sonríe. En un intento por ponerse encima de él, ambos se desequilibran y se caen al suelo. Comienzan a reírse a carcajadas, que se reanudan después de cada beso. Al cesar las risas, él le da un beso largo, y al separarse, susurra:
-Te amo, ¿lo sabes?
-Espero que sepas que yo también.- dice ella.
Los besos que llegan se ven interrumpidos por sonrisas, y por paradas porque la ropa sobra. Todo excepto el amor sobra cuando se convierten en uno, una vez más. Todo es lento, y con cuidado, como si fuera la primera vez. Pero no lo es. Lo único que ambos quieren y necesitan es ir lento, saboreándose, y queriéndose. Se dan cuenta que el amor es algo muy fácil de perder, lo han visto hace nada en Angie y Harry, y no quieren que el suyo se acabe. 
Y desde luego, no acabará. Habrá peleas, ganas de salir corriendo y obstáculos que parecerán insuperables. Pero Liam y Kris superarán cada obstáculo, y conseguirán aquello que muy pocos logran: Estar juntos para siempre.

Hooooolis :3 Pues nada, aquí está el capítulo 45, que quiero dedicar a Isa, que en esta novela es Lis. Es su cumpleaños, así que ¡MUCHÍSIMAS FELICIDADES! Espero que lo pases genial y esas cosas ¿sí?
Bueno, la idea de quemar el papel en la Torre Eiffel la he sacado de 'Tengo Ganas De Ti', por si alguien no lo sabe. Recomiendo esa película, por cierto, aunque no me gustó tanto como 'Tres Metros Sobre El Cielo.'
Muchísimas gracias por leerme, otra vez xxx.

17.4.13

And she will be loved, chapter 44.


-Narrador-
Son las diez de la mañana en Londres. Kris está tumbada en el sofá, desde las cuatro de la mañana. Le cuesta dormir desde que se fue Angie. Se siente sola en casa, y no deja de pensar que quizás se pasó con ella. Es su mejor amiga, su hermana. Sin Angie, no estaría en Londres. Seguiría en Los Ángeles con su asqueroso padre. Además, la relación entre Harry y Angie es cosa suya, y no debería haberse metido. Llamará a Angie hoy, ya que es su cumpleaños, y se disculpará. Sí, será lo mejor.
En televisión empieza una película, Love Actually. Intenta concentrarse en ella, y cuando al fin lo consigue, se oye el cerrojo de la puerta principal abriéndose. ¿Pero qué...? Kris empieza a ponerse nerviosa. ¿Quién puede ser? No le ha dado la llave a nadie. Seguro que es una de esas bandas peligrosas que controlan cuanta gente hay en una casa para asaltarla. Mierda.
Se incorpora lentamente, sin hacer ruido. En ese momento, una figura familiar entra en el salón. El corazón de Kris para, como para coger carrerilla y empezar a latir con fuerza y rapidez. Su respiración se acelera, y su piel se pone de gallina.
Su novio, Liam Payne está en su casa. En Londres. Se levanta de un salto, y corre hacia él, abrazándolo. Él suelta una risita, y la estrecha contra él.
-Esto... esto no está pasando. Voy a despertarme... y estarás lejos, en Estados Unidos, a cuatro meses de mi. Esto... esto no puede ser. Estoy soñando.- dice ella, incoherentemente. Liam sonríe, y hace que ella le mire.
-Esto es la vida real, amor. Estoy aquí, contigo.
Kris suelta un suspiro de alivio, y se lanza a sus labios, como si estuviera sedienta. Se besan, y de pronto, otra figura familiar les interrumpe. A Kris se le para el corazón, y esta vez en serio.
-¡Hola, Kris! Bueno, no os interrumpo. Voy a despertar a Angie, seguro que no se espera que esté aquí.- dice Harry, sonriente. Harry Styles también está en su casa. ¿Problema? Angie está en España. Con Bieber, para mejorar la situación.
Kris empieza a hiperventilar, y Liam la mira, con preocupación.
-¿Amor? ¿Qué pasa?
-Angie... no está. Está en España... con Bieber.- susurra ella, sollozando. Se ve venir lo que va a pasar.
-¿Qué está dónde?- dice Liam, asombrado
-Intenté detenerla...-solloza ella. Liam la abraza, intentando consolarla. Harry baja las escaleras, asombrado.
-¿Dónde... dónde está Angie?- pregunta, mirando a Kris. Ella niega con la cabeza, y suelta un sollozo. No va a decirle a Harry dónde está Angie.- Kris, no me hagas repetirlo, ¿dónde está?-
Kris no contesta, y Harry pierde los estribos. Golpea la barandilla, y se acerca, cabreado a la chica. Liam se pone en medio.
-Styles, frena. No la tomes con ella.
-¿DÓNDE COJONES ESTÁ MI NOVIA?- chilla Harry. Al no recibir respuesta, saca su iPhone.- ¿No vas a decírmelo? Bien, lo averiguaré yo mismo.-
Teclea 'Angie Farrell' en el buscador. La primera noticia es como una patada en el estómago.
'Angie Farrell y Justin Bieber ¿juntos de nuevo?" "La encantadora pareja adolescente está en su momento perfecto. La joven estadounidense acompaña a Bieber en su viaje por España, apoyándolo después de su mala racha en Londres. El ídolo canadiense parece infinitamente más feliz desde que Angie está con él. Nuestra duda es la siguiente, ¿qué ha pasado entre Harry Styles, de One Direction, y Angie Farrell? Fuentes cercanas aseguran que cortaron porque Styles tuvo una aventura con la cantante Taylor Swift, con la que tuvo un pequeño romance."
-Qué ha pasado entre Harry Styles y Angie Farrell.- murmura Harry.- A mi también me gustaría saberlo.-
-Harry, por favor. No saques conclusiones precipitadas. Ella no te está engañando. Se ha ido con Justin a España para apoyarle, es su... su  mejor amigo. Han crecido juntos.- dice Kris, intentando desesperadamente hacerle entrar en razón.
-¿Y cómo sé yo eso? Ella me ha mentido con lo del móvil, y se ha ido a España. Todo a mis espaldas. ¿Cómo sé que no se ha liado con Bieber también?-
-Angie no es así, Harry.- dice Liam.
-La gente cambia.- zanja Harry, y sale disparado por la puerta. Liam y Kris lo llaman, pero él corre hasta el coche. Llama mientras conduce a Paul, su mánager, que le reserva el avión privado en Heathrow, en una hora, rumbo a Barcelona.

-Angie-
Mi móvil vibrando me despierta. Abro los ojos con pereza, y veo que estoy en la habitación de Justin. El sentimiento de culpabilidad vuelve a invadirme. Ni siquiera he besado a Justin, pero me siento culpable estando aquí, y durmiendo con él, a pesar que cada uno duerme en una punta de la cama. Ayer me quedé hablando con él hasta tarde, y luego me quedé dormida. Él duerme en una esquinita de la cama, acurrucado y con cara de felicidad. Sonrío, y seguidamente cojo el móvil, y salgo a la terraza.
-¿Sí?
-¿Angie?
-¿Kri...Kris?- digo, asombrada.- ¿Qué ha pasado?
-Harry...- dice ellaHarry y Liam están en Londres. Venían a darnos una sorpresa. Harry ha averiguado que estás en España con Bieber, y ha... desaparecido.-
-¿Cómo que ha desaparecido?- pregunto, aterrorizada.
-Se ha ido, y le llamamos y no contesta. No sé dónde está, o qué está haciendo.
-Dios mío...- sollozo.
-He intentado convencerle de que entre Justin y tú no hay nada. No sé... si me ha hecho caso.
-Posiblemente no, Kris. Pero gracias de todas formas.- suspiro.- Voy... voy a intentar localizarlo.
-Por cierto... Felicidades de parte mía y de Liam. Ya tienes 18.
-Menuda manera de celebrarlo.
-No digas eso, tonta. No te rayes por Harry, lo encontraremos pronto.- dice Kris, intentando animarme.
-Gracias... por todo Kris. Siento ser tan estúpida.
-No eres estúpida, cielo. Tengo que dejarte ya, ya hablaremos.
-Adiós, te quiero.
-Y yo, tonta.
Cuelgo, y miro los mensajes. Mucha gente me ha felicitado ya.
Mamá: Vaya, mi niña. ¿Con qué 18 ya, eh? Felicidades, cielo. Ni siquiera puedo creérmelo, parece ayer cuando las dos jugábamos a las princesas juntas, o cuando hacíamos magdalenas. ¿Te acuerdas? Yo nunca voy a olvidarlo. Disfruta mucho de tu día, mi niña. Quiero verte pronto ¿vale? Te quiero.
Hayley: ¡CARIÑO! ¡18 YA, ERES MAYOR DE EDAD! Parece mentira, parece ayer cuando teníamos 11 añitos y deseábamos con todas nuestras fuerzas que llegara nuestro 18 cumpleaños... Buenos tiempos aquellos ¿eh? Se te echa mucho de menos por LA, cerda. Vuelve pronto, por favor. Te quiero millones.
Lis: ¡Felices 18, primita! Te echo mucho de menos, no sé nada de ti desde Navidad. ¡Y recuerda que tienes que presentarme aún a cuatro británicos y un irlandés! Yo lo dejo caer jajajaja. ¡Pásalo muy bien, te quiero!
Niall: Oh, si mi mejor amiga cumple ya los 18... ¡MUCHÍSIMAS FELICIDADES! Me encantaría estar ahí, darte uno de mis abrazos y decirte muchas veces que te quiero mucho. Pero bueno, eso lo haré cuando vuelva. Que será en menos de lo que te esperas. No quiero que lo pases mal por nada, cielo. Disfruta de tu día, y enséñale al mundo esa sonrisa tan perfecta que tienes (la mía será mejor que la tuya en abril, cuando me quiten el aparato. Dato interesante ¿eh?) ¡Te quiero mucho, imbécil!
Lou: ¡MI ÍDOLA CUMPLE AÑOS YAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! ¡YA ERES VIEJA COMO YO! Bueno, en realidad yo siempre seré más viejo, pero ya sabes que mi mentalidad es muy en plan 'forever young' JAJAJAJAJAJAparo. Muchas felicidades, tontita. ¡Te echamos de menos por aquí! Te quiero.
Zayn: ¡Felicidades, ANGELA! Ya bueno, sé que te jode que te llamen así, y yo como no cabe duda de ello, lo hago para joderte. ¡ES BROMA! Pásalo muy bien con tus 18, y ¡lo celebraremos a la vuelta! Te quieeeeeeeeeeeeero xxxxx.
Ed: ¡Felicidades a la chica con la sonrisa más bonita del mundo! Pásalo muy bien, a ver cuando te veo por uno de mis conciertos (acompañada de Harry, por supuesto) (O no, ven sola) (O haz lo que quieras, yo te quiero igual) xx.
Little Mix: ¡Felicidades a la chica del pervertido, ejem, queremos decir Styles! JAJAJAJAJA. ¡Pásalo muy bien, preciosa, por aquí abundan las ganas de verte! Besos de Perrie, Leigh, Jade y Jesy xx.
Eleanor: ¡FELICIDADES, CARIÑO! Siento no haberos llamado a Kris y a ti últimamente, llevo un lío de exámenes imposible... ¡Pero pronto nos iremos de compras tú y yo ¿eh? ¡Pásalo genial!
Hay muchos mensajes, e intento contestar a varios de ellos. Aún sintiéndome mal por lo de Harry, entro a la habitación. Justin corre hacia mí, y me abraza.
-¡FELICIDADEEEEEEEEEEEEEEEES ENANA!- grita, levantándome del suelo. Seguidamente me besa las mejillas muchas veces, mientras yo río débilmente.- Uuuuuuuuh, no me gusta esa risita ¿qué te pasa?-
-Harry se ha enterado de que estoy aquí, y ahora nadie lo localiza. Me preocupa mucho que haya hecho alguna estupidez...- suspiro, con los ojos llorosos. Él chasquea la lengua, preocupado, y me abraza a él.
-Tranquila, Angie... ya verás como todo va bien.- dice él, acariciándome el pelo.
Ninguno de los dos sospechaba lo muy equivocado que estaba Justin. En unas horas, mi mundo iba a desmoronarse, sin poder hacer nada por pararlo o remediarlo. 

-Narrador-
Kris y Liam están en el sofá, abrazados. Ambos han perdido hace bastante rato la noción del tiempo. Después de un beso, él se levanta de un salto, ante la atenta mirada de Kris.
-Venga, haz las maletas.
-¿Hacer las maletas? ¿Para qué?
-Ah, se me olvidó mencionarte el pequeño detalle de que nos vamos a Hawaii, una semana, solos. A una isla pequeña, en una cabañita a orillas del mar, con nuestra propia playa privada.- anuncia él. Kris le mira, asombrada.- ¡Venga, lenta! Te ayudo a hacer las maletas.-
Suben juntos las escaleras, y cogen ropa de verano. Bikinis, vestidos, faldas, pantalones cortos, blusas... Kris insiste en que se vaya cuando elige la ropa interior, pero él se niega entre risas. Al final, la eligen entre los dos.
Luego, salen hacia el aeropuerto. Van en un avión público, en primera clase. Cuando llegan, un avión privado sale rumbo a Barcelona, con otro componente de One Direction en él, que va a España a averiguar qué ocurre entre su novia y el archiconocido Justin Bieber.
Liam y Kris pasan un rato largo firmando autógrafos (más él que ella, pero la chica comienza a ser conocida entre las directioners) y haciéndose fotos. No oyen ningún comentario negativo sobre la pareja que hacen, cosa que se agradece bastante. La verdad es que las directioners no han tenido demasiados problemas con Angie o con Kris. A Angie la llamaron interesada en el primer momento, pero después de la actitud de Harry en el MSG, y su declaración de amor, las quejas y los insultos se acallaron bastante.
Al llegar en el avión, ambos se hunden en unos asientos de primera clase comodísimos. Cuando parece que nadie les escucha, él susurra, con voz juguetona:
-Procura dormir lo máximo que puedas. Cuando lleguemos a Hawaii, vas a hacer todo, menos dormir.-
Kris se sonroja, ante la risa de su novio. Luego, le pega con suavidad en el pecho, y protesta.
-Deja de pasar tanto tiempo con Louis y con Harry, Liam. Te va mal.-
-Sé que te encanta esta faceta de mi.- susurra él, mordiéndole el lóbulo de la oreja. Ella suelta una risita, antes de quedarse profundamente dormida en esos comodísimos asientos de primera clase, en brazos de Liam.

Horas más tarde.
Kris despierta en una cama demasiado cómoda para su gusto. Pero ¿cuántas horas ha dormido? Abre los ojos, y se queda atónita. Está en una habitación desconocida, decorada con gusto. Se oye el mar fuera. Luego, se mira a si misma y descubre que lleva el pijama puesto, por algún tipo de magia negra. Ríe para sí con ese pensamiento. Se levanta, estirándose, y coge de la maleta un vestido vaporoso y cómodo. Luego, abre una puerta, que es el baño. Tiene jacuzzi, ducha con hidromasaje y a saber que otras cosas. Abre otra puerta, para encontrarse con un salón invadido totalmente por plantas. Avanza por él, para soltar un grito de emoción. ¡Hay una piscina en mitad del salón! Sonríe, y se agacha a tocar el agua, que está a una temperatura muy agradable. Luego, sigue caminando por el salón. Llega a una cristalera, y se queda maravillada. Ante ella, está una playa de arena blanca, perfecta, y el mar azul. Sonríe, y sale a la playa. Liam está en la orilla del mar, mirando al horizonte. Se gira al oír la cristalera cerrarse.
-¡Bienvenida a Hawaii, amor!- grita, y Kris sonríe.- Me tenías ya preocupado, has dormido casi veinte horas.-
-Ya sabes, tengo complejo de marmota. Y además, no he dormido nada desde que Angie se fue.- dice ella, ya a su lado. Él sonríe, la coge de la cintura y la besa. Se dejan caer en la arena, donde sus besos siguen. Se necesitan uno al otro, a pesar de que hace apenas un mes de que se despidieron en Heathrow. No saben estar separados, no pueden.
Besos, muchos besos. Uno detrás de otro, cada uno distinto del anterior. Besitos cortos, besos en el cuello, besos en las clavículas. Besos por la cara, besos en la nariz. De cualquier manera, besos, que lo único que demuestran es que se quieren, cada día más que el anterior.
-Te echaba de menos. No sé... no sé vivir sin ti, Kris.- susurra él. Ella sonríe, y hunde sus dedos en el pelo de Liam, sonriente. Le besa, una vez más, y le mira a los ojos.
-No hace falta que aprendas a vivir sin mi. No te hace ninguna falta.- dice ella.- Te quiero.
-Te quiero mucho más, cariño.
Kris gira sobre si misma, quedando encima de él.
-Eres preciosa.- dice él, acariciándole la mejilla.
-No lo soy.
-Eres preciosa.- repite él, sin hacerle caso.- Quien diga lo contrario, tiene un problema grave en la vista.- Ella sonríe, y se acurruca en su pecho.
-Te quiero.
-Eso ya lo has dicho.- se burla él. Ella gruñe, mientras Liam ríe.
-Si quieres dejo de decirlo.
-Decir 'te quiero' es la tercera mejor cosa que puedes hacer con los labios.- dice él. Ella arquea las cejas, esperándose algún comentario del estilo Louis y Harry.
-¿Y la segunda?
-Besarme.- afirma él, sonriente.
-¿Y la primera?
-Sonreír.
Kris suelta una risita. Su novio es adorable aunque no se lo proponga. Le abraza, y él a ella. "Felices" les queda bastante corto con como se sienten. Y aquello de "a tres metros sobre el cielo" les va pequeño, también. Ambos prefieren pensar que se sienten en otro planeta.

-Angie-
El día iría perfectamente si no fuera porque sigo sin poder localizar a Harry. Justin ha intentado distraerme con los regalos, pero no lo ha conseguido. Me ha regalado una cámara profesional, de las caras. Fredo me ha hecho un brownie de oreos, con una caja en medio, con una pulsera dentro. Scooter me ha regalado unos Beats naranjas, preciosos y de los que estoy enamorada. Nicole me ha regalado un vestido negro, en un paquete que me ha dado pena romper, ya que iba envuelto con fotos nuestras, y un gran letrero en el que ponía "Por todas esas sonrisas, y las que nos quedan." Pattie me ha regalado un álbum con fotos de Justin y de mi, desde el primer día. Usher, una guitarra. Todos los regalos han sido perfectos, pero hoy desde luego no es mi día. No estoy bien, tengo un mal presentimiento que me acecha en todo momento. Al final, me llevan al Palau Sant Jordi a que me distraiga con las pruebas de sonido de Justin, que lo único que hacen es hacerme estar peor, recordando momentos de la gira con Harry. Soy imposible, les estoy dando un mal día a todos.
Todo empeora cuando Ryan llega corriendo a la pista.
-¡Harry está ahí fuera, el guarda le acaba de dejar entrar!- exclama. Justin para de cantar. Ignoro como le ha oído. Nicole me arrastra con ella al backstage, y Justin nos sigue. A mi me da una especie de ataque de ansiedad. Comienzo a llorar y a temblar.
-Cariño, tranquila, por favor...- me suplica Nicole, abrazándome. Justin se muerde los labios y aprieta los puños, sintiéndose impotente de no poder consolarme. Yo susurro palabras incoherentes de "Harry... cortar... conmigo..."- Cielo, Harry no va a...-
-¿Os importa dejarme a solas con mi "novia"? O bueno, eso era hasta hace unos días.- dice una voz. Levanto la vista, y le veo ahí. Me tiembla todo el cuerpo, parece muy enfadado. Justin le echa una mirada fulminante.
-Y una mierda, Styles. No te voy a dejar solo con ella.
Nicole, como siempre, pacifista, coge a Justin del brazo.
-Vámonos, Justin. Ellos tienen que hablar.- luego, mira a Harry entrecerrando los ojos.- No saques conclusiones precipitadas de las que puedas acabar arrepintiéndote, Styles. No es lo que piensas.-
-Eso lo juzgaré yo ¿o qué?- dice él, con fiereza. Cuando se van, me mira. En sus ojos falta ese destello de deseo y cariño que había antes. Sus ojos verdes esmeralda parecen más oscuros, llenos de rencor y rabia.
-Harry, por favor...- suplico, rompiéndome por dentro.
-No hables.- gruñe él.- No hables, porque tengo claro que quiero hacer, y no vas a convencerme de otra cosa.-
Miro al suelo, pero aprieto los puños.
-Que equivocado estás, Harry.
-¿Qué quieres decirme con eso?- pregunta él, algo atónito.
-Que me dejes explicarme, y luego ya si eso, haces lo que te de la gana.- digo. Hasta yo misma me asombro de mi fiereza. Pero decido seguir, quiero dejarle claras las cosas.
-Está bien, habla.- dice, chasqueando la lengua.
-Estoy en España porque Justin me "chantajeó" para venir. En Londres, tuvo una parada cardiorrespiratoria en mitad de un concierto. Me llamaron, y fui al hospital, casi asumiendo que mi mejor amigo, mi hermano, había muerto. Cuando despertó, de milagro, le dije que su fama le estaba superando. Que tenía que tomarse un descanso, o iba a acabar mal. Lo sé por experiencia, he tratado con muchos músicos, y cuando la fama te supera, o paras, o es como ir conduciendo a toda velocidad y sin frenos hacia un acantilado. Le dije que dejara la gira en Estocolmo, su último concierto programado, y que se fuera con su familia. Él accedió, a cambio de que yo le acompañara a España. Quería remediar sus malas actuaciones en Londres, y según él, si yo estoy con él, todo va mejor. Fue una especie de chantaje, pero él es así. Y yo soy su amiga, no sé pagarle con su misma moneda. Me ha ayudado mucho en estos años. Admito que no decirte que venía ha sido un fallo por mi parte, y entiendo que estés dolido. Pero no tienes derecho a ponerte así conmigo. Sé que has venido, Harry. Sé que tenías la certeza de que yo estaba aquí ¿qué? ¿Tirándome a Justin? ¿De verdad me crees capaz de eso? Harry, estoy... o estaba, porque después de esto no sé ni que estoy, enamorada de ti. Eres... eras el único para mi. Soy fiel, a diferencia de muchas de las chicas con las que has estado. Yo no soy Taylor Swift, Harry. No me lío con el primero que pasa.- digo. Las palabras salen, plasmando en ellas mi frustración. Él me mira, le he roto los esquemas.
-Pequeña, yo...
-Ahórratelo, Harry.- suspiro, y me seco las lágrimas.- Venías aquí a cortar conmigo. Hazlo de una vez.-
-Pero...- dice, frustrado.
-¿Pero qué, Harry? Me has dicho que nada de lo que yo dijera iba a hacerte cambiar de opinión. Tienes que medir tus palabras, y tus actos.- grito yo.
-¡No te consiento que me des sermones!- explota él.
-¡Y yo no te consiento que desconfíes de mi! ¡Te dejé claro que yo te quería a ti, imbécil!- grito, explotando en lágrimas.- ¡Hazlo de una vez, Harry!
-No puedo.
-¡Pues lo haré yo!- grito, y me seco las lágrimas, otra vez.- Esto... se ha acabado, Harry. La base de toda relación es la confianza, y tú no confías en mi.-
-Está bien.- sisea él.- No... no quiero volver a verte.
Dicho esto, se da la vuelta, y se va. Para siempre, lejos de mi. Por primera vez, noto como si algo se hubiera roto. Se va por primera vez, lejos de mi corazón. 
Justin canta por detrás, en las pruebas de sonido, mientras yo me derrumbo, con mi mundo. Todo se hunde para mi.
 Tell me, was it worth it?
We were so perfect.
I guess this is what's meant to be.
There's nothing like us, there's nothing like you and me.
Together through the storm...
Me hundo en Nothing Like Us, que describe mi situación ahora mismo. Todo se ha acabado. No puedo ver más allá de Harry, de mi relación con él. No sé que hacer sin él, nadie me ha enseñado a vivir con este dolor que siento ahora mismo en el pecho. El simple hecho de respirar me duele.

Gracias por leerme :3 Si podéís, seguidme en @underthelightsb , y recuerdo una vez más, que tengo otra novela, Show me what you're all about. xx.

7.4.13

And she will be loved, chapter 43.

(Se supone que antes de ir a España, en BT Justin estuvo en Portugal, pero he decidido suprimirlo. Justin sale de Londres el 13, está en España 14, 15 y 16 y el 16 por la noche, después del concierto de BCN, pone rumbo a París.)
Por cierto, si lees esta novela, o 'Show me what you're all about' , sígueme en twitter, en la cuenta de las novelas (@underthelightsb) Gracias xx.

-Angie-
Cierro la maleta, y dejo escapar un suspiro. Mañana me voy a España con Justin. Pongo la maleta de pie sobre las ruedas, y la empujo hasta las escaleras. Al fin, consigo dejar la maleta en la entrada de casa. Miro el reloj, las diez y media de la noche. Tengo irme a dormir ya, Justin, Fredo y Ryan vendrán a recogerme a las seis y media, para llegar al aeropuerto a las siete, y salir de Londres casi a las ocho. Llegaremos a Madrid sobre las diez y media.
Subo a mi habitación, y cojo el teléfono. Mientras estoy tecleando un WhatsApp para Harry, Kristen entra en mi habitación, apoyándose en el marco de la puerta.
-¿Estás hablando con Harry?- pregunta. Yo asiento.- ¿Le has contado que te vas a España con Bieber?
Niego con la cabeza, sintiéndome culpable. Ella suspira.
-Angie, te estás cargando vuestra relación.- me regaña.
-Tu opinión dejó de contar cuando decidiste dejar de hablarme.
-Perdona, fue tu opinión la que dejó de contar cuando decidiste mentir a tu mejor amiga.- contraataca ella. Tocado y hundido. La verdad es que tiene razón, pero soy demasiado orgullosa como para pedirle disculpas. Ella gruñe, y me llama.- Angie, te estás equivocando en esto. Y créeme que si en algún momento tengo que encubrirte, no lo haré. Como Harry me pregunte por ti, se lo contaré todo-
-Como lo hagas, dejaré de hablarte para siempre, y perderás toda mi confianza, Kristen.- gruño yo.
-Es por tu bien, Angie.
-Siempre es por mi bien, ¿no? Inventa otra excusa más currada, anda.- bufo.
-Cuando te des cuenta de lo equivocada que estás...- suspira ella, y se da la vuelta, metiéndose en su cuarto.
Decido inventarme una excusa, para que Harry no sospeche nada. Con un poco de suerte, iré a España tres días, el 16 por la noche cogeré el 'Eurotunnel' de Calais a Dover, y estaré aquí el 17 por la mañana.
Hundo la cabeza en mis brazos. ¿Voy a mentir a mi novio por Justin? ¿De verdad?
A: Harry, tengo malas noticias.
H: ¿Qué pasa? No me preocupes.
A: Tengo que llevar el móvil a la tienda, se me ha caído al suelo y tengo toda la pantalla rota. He leído que tardan varios días en darte otro, así que me lo devolverán el 17, supongo.
H: ¿No podré felicitarte por tu cumpleaños, entonces?
A: Me da que no...
H: Pero son tus 18 años, joder. Que rabia.
A: Ya me compensarás cuando vuelvas, no pasa nada. 
H: Te felicitaré por twitter...
A: Me parece perfecto, amor.
H: Tengo que irme, cielo. Supongo que cuando vuelva estarás dormida, y luego ya no hablaremos más hasta el 17, así que buenas noches, recuerda que te amo, y felices 18.
A: Te quiero, Harry.
H: Yo más de lo que imaginas, pequeña.
Apago el teléfono, tragando saliva. Mierda. Me siento muy jodidamente culpable, Harry no se merece esto. Pero es que Justin me necesita, a pesar de todo. Me tumbo en la cama, con el pensamiento "solo son unos días" y me quedo dormida al instante, para mi asombro.
La alarma de mi móvil suena. Las seis. Me levanto lo más rápido que puedo, y desinstalo en WhatsApp del móvil. Me siento culpable, pero me conciencio de que estoy haciendo lo correcto. Me pongo: http://www.polyvore.com/reach_it/set?id=75704816, y me peino en el baño. Bajo las escaleras rápidamente, y me preparo un café. Mordisqueo una galleta, bastante nerviosa. Algo me dice que este viaje va a acabar muy mal. Maldita intuición femenina. Voy a acabar paranoica.
Alguien da golpecitos en la puerta principal, y yo dejo la taza en el fregadero, cojo la chaqueta del perchero, y agarro mi maleta. Ni siquiera le digo adiós a Kris, creo que ayer me dejó mayormente claro que si me iba, nuestra amistad se había acabado. Abro la puerta, y me encuentro de frente con Justin, que me besa la mejilla derecha.
-¡Hola, Angie!- sonríe, feliz. Coge mi maleta, y me arrastra con él hacia el coche. Me da el tiempo justo de cerrar la puerta. Mete la maleta en el maletero, y sube conmigo a la parte de atrás del coche.
-Buenos días, chicos.- saludo a Fredo y a Ryan al entrar.
-¿Buenos?- gruñe Fredo, recostado en el asiento del copiloto.- ¡Me he levantado a las seis de la mañana! ¿Eso es "bueno"?-
-Eh... ¿Malos días, Fredo?- digo, con sarcasmo.
-Eso está mejor.
Suelto una carcajada, y me ato el cinturón.
-¡ESPAÑA, ALLÁ VAMOOOOOS!- grita Justin. Los demás reímos, y arrancamos hacia el aeropuerto.
Una hora y media más tarde, estamos en el avión, despegando hacia Madrid. El viaje dura dos horas y media, y me duermo en el hombro de Justin a los veinte minutos de haber despegado. Mis sueños son una mezcla bastante rara de culpabilidad, Justin, Harry y Kris. Estoy besando a Harry, cuando de pronto se convierte en Justin, y Kris aparece de repente echándome la bronca. Luego, aparece Liam, que me grita algo, y besa a Kris. Luego Liam se convierte en Harry, y yo salgo corriendo.
Alguien empujándome y dándome toques suaves en el hombro me saca de mis sueños. Abro los ojos, para encontrarme con los ojos de Justin, que me miran con un matiz de preocupación.
-¿Estás bien?- pregunta, preocupado.
-Solo era... un mal sueño. ¿Y tú qué tal estás?- pregunto, esbozando una sonrisa.
-Feliz, ahora que he salido de Londres. Necesitaba irme de allí. Los paparazzi me estaban matando.- suspira él. Yo le beso la mejilla, intentando reconfortarle. Los días en Londres han sido muy malos para él. Casi agrede a un paparazzi, y salió en todos los medios (http://www.youtube.com/watch?v=T_Cq8dvLaIg) Han sido unos malos días para él, con lo de la parada respiratoria, y su cumpleaños. Todos esperamos que en España sea mejor. Salimos del avión, y Fredo grita en español:
-¡TE AMO, ESPAÑA!
Los demás nos limitamos a reírnos, e ir hacia la terminal. Al salir a la zona de llegadas, muchísimas fans le esperan, llorando y gritando.
-¡Justin, te queremos!
-Justin, ¡aquí, por favor!
-Justin, ¡cásate conmigo!
-¡Fredo, tengo Oreos!
Fredo ríe con él últimos comentario, y le lanza un beso a la chica que se lo ha dicho. Justin gasta media hora con las fans, haciéndose fotos y firmando autógrafos. Un buen detalle, por su parte. Luego, nos metemos en el coche y vamos hasta el hotel. Al salir, hay más fans. Fans por todas partes. Hacen sonreír a Justin, más de lo que ha sonreído en Londres. Al entrar al hotel, nos quedamos en el hall mientras le dan a Pattie las llaves de todas las habitaciones.
-Justin, tienes una hora para relajarte, a las doce o así llega la primera entrevista.
-¿Quién va a entrevistarme?- pregunta, interesado.
-Xavi Martínez, no sé si te acordarás de él, un chico de unos 25, rubio, muy simpático, de... Europa FM, creo.- dice Scooter.
-¡Ah, sí! Me acuerdo de el, me regaló una camiseta de la selección española.- sonríe Justin.- ¡Ese tío es genial! Estoy deseando verle.
Distribuyen las habitaciones, a mi me ponen con Nicole, que lleva en España dos días de ensayo. Ahora mismo, sigue ensayando en una sala del hotel, así que la veré a la hora de comer.
-¿Angie puede estar conmigo en la entrevista?- pregunta Justin.
-Si a Xavi no le importa, supongo que sí.- sonríe Scooter. Justin asiente, feliz.
La habitación de Justin y la mía están al lado, la suya es una suite, y la mía simplemente una doble superior. Es solo para dos días, así que no importa mucho de que tipo sea. Entro en la habitación, y abro la maleta. Empiezo a deshacerla, cuidadosamente. Luego, me tumbo en la cama, dejando que los pensamientos se apoderen de mi. Sigo pensando en Harry. Solo puedo pensar que como se entere, de verdad me he cargado nuestra relación. Y como cortemos, no podré soportarlo. ¿Y entonces por qué he venido? Empiezo a arrepentirme. Entonces, Justin entra en mi habitación, me he dejado la puerta abierta sin querer.
-Hola, Farrell.- sonríe él, sentándose en la cama.
-Hola, Biebs.- digo, con voz débil.
-¿Qué pasa? Te noto algo... apagada.
-No le he contado a Harry que estoy aquí.- susurro.- Me siento culpable.
-¿Quieres llamarle desde mi teléfono?
-¿Tú me dejarías hacer eso?
-Por supuesto, tengo su número.- saca su iPhone, y me lo entrega en la agenda, con el contacto "Styles" abierto. Yo trago saliva, y llamo. Los tonos suenan, hasta que una voz grave me lo coge.
-¿Sí?
-¿Eres... eres Paul?- pregunto. Paul es el mánager de los chicos. No lo conozco en persona.
-Sí, ¿quién eres tú, y por qué tienes el número de Harry?
-Soy su novia, me llamo...- digo, y antes de decirle mi nombre, me cuelga. Me separo el teléfono de la oreja, sorprendida. Justin me mira, expectante.
-Creo que su mánager me ha confundido con una fan obsesionada por Harry que dice ser su novia.- suspiro.
-Bueno, no te preocupes. Se lo dirá a Harry, y él llamará a este número otra vez.- dice Justin, intentando consolarme.- Va, voy a animarte como a Fredo.
Se levanta ante mi mirada interrogante, y va hasta en minibar, para sacar un paquete de Oreos. Yo suelto una risita, y cojo el paquete al vuelo, cuando él me lo lanza. Lo abro, y compartimos las seis Oreos del paquete. No hablamos, simplemente nos reímos el uno del otro mientras nos comemos las galletas. Scooter llama a la puerta, y nos indica que la entrevista es en la última planta, en la sala Cervantes. Vaya nombre, oye. Llegamos allí, y nos sentamos en un sofá, con un cartel enorme detrás con "Justin Bieber, Believe Live" estampado muchas veces. A los minutos, Xavi Martínez entra en la sala, con una sonrisa en el rostro. Madre mía con el tal Xavi. ¡Es guapísimo!
-¡Hola, chicos!- dice, en un perfecto inglés. Dios mío, ¿y su voz? Que voz tan... sexy. Justin se levanta, y hace con él un saludo raro. Yo me levanto detrás.- ¡Tenía ganas de verte de nuevo, Justin! A quién no he tenido el placer de conocer aún es a esta chica tan preciosa. Hola, cielo ¿cómo te llamas?-
-Hola, Xavi.- le dirijo una sonrisa, y le doy dos besos.- Me llamo Angie. Angie Farrell.
-¿Angie Farrell? ¡Entonces tú eres la chica de Harry!- dice él, sonriente.- Me parecéis una pareja encantadora, ojala vengáis pronto juntos a España, y os llevo a mi programa de radio.-
-Sería genial.- sonrío.
-Déjame ser indiscreto, ¿ha pasado algo en vuestra relación?- pregunta él, con delicadeza.- Lo digo, porque como tú estás aquí con Justin, pues...
-En absoluto, Harry y Angie están tan enamorados como el primer día. Angie es mi mejor amiga, ha venido a España para apoyarme.- dice Justin, salvándome.
-Oh, vale.- dice Xavi.- Lo siento si he parecido el típico periodista cotilla. Bueno, Justin. Háblame de tu tiempo en Londres, no ha sido el mejor de tu carrera, ¿no?
-Ha sido horrible.- confiesa Justin.- En gran parte por culpa de los paparazzi.
-La verdad es que su actitud ha sido lamentable. Su trabajo es hacer fotos, no arruinar cumpleaños e insultar a famosos.- dice Xavi. Este tío me cae genial, qué queréis que os diga.
La entrevista dura una media hora, en la que los tres nos reímos como nunca. Justin disfruta muchísimo la entrevista, le veo feliz. Me encanta verle así.
Lo que no intuía es que en vez de apoyarle a él, en unos pocos días, los papeles iban a cambiar.

6.4.13

And she will be loved, chapter 42.


-Angie-
Resoplo, sabiendo que lo que me espera no es fácil. Giro sobre mi misma, y camino hacia el sofá, hasta que me sitúo justo en frente de Kris.
-Kris, déjame explicártelo.
-Espero que la explicación sea buena. Porque llegar de salir por ahí sin ti, porque "te encontrabas mal", que no estés en casa, que ponga la televisión y que salgas tú huyendo de Amarelli con Bieber perseguida por una horda de paparazzis. Eso es todo menos normal.- dice, sin parar.- No puedes permitirte esto, Angie. Y menos cuando estás saliendo con Harry y estáis lejos el uno del otro. La prensa va a sacar sus propias conclusiones sobre esto, y tú te vas a cargar tu relación con Harry. Así que coge tu bonito móvil, y llámalo antes de que él vea lo del cumpleaños y se enfade. Ya sabes lo celoso que es, Angie.-
-Pero...
-No hay peros, Angie. Llámalo. Ya.
Suelto un gruñido, y cojo mi teléfono. Marco el móvil de Harry, ya que me lo sé de memoria. Espero varios tonos, hasta que él descuelga, con voz alegre.
-¡Hola, pequeña! Te echaba de menos.- exclama él.
-Y eso que no hace ni tres horas que hemos hablado.- río yo, y él ríe conmigo. Kris me mira, instándome a que le diga el motivo de mi llamada.- Oye, Harry... tengo que decirte algo.
-¿Qué ha pasado, cielo?- pregunta, preocupado.
-Es sobre Justin.- murrmuro yo.
-¿Justin? ¿Justin Bieber? ¿Qué te ha hecho ahora?- gruñe él.- Te juro que vuelvo y le mato.
-No... he sido yo.
-¿Tú? ¿Qué quieres decir?- dice, confuso.
-He ido a su cumpleaños. Y hace unos días me llevó al trabajo porque llovía.- admito, en voz baja. Él se queda en silencio unos minutos, y al fin resopla.
-Sabes que no me gusta que vayas con él, y menos cuando no estoy yo allí para controlar sus actos.- dice él, con voz de decepción. Yo trago saliva.- Pero me has dado un susto tremendo, joder. Pensaba que... que me ibas a dejar por él.-
-¿Dejarte por él? Por Dios, Harry.- digo yo.
-No sería tan raro, os conocéis desde hace mucho, y supongo que entre vosotros habrá una confianza especial.- dice él.
-No voy a dejarte por él, Harry. Ni por él ni por nadie.- digo, con seguridad.
-Lo sé, cielo. Confío en ti.- dice él, y noto que está sonriendo.- No tienes que disculparte por lo del cumpleaños, sabes que aunque salieran rumores no me los creería. Y entiendo que quizás quieras recuperar vuestra amistad, porque sé que es importante para ti. Solo voy a pedirte una cosa, Angie.
-¿Qué?- pregunto.
-Ten cuidado, por favor. Si te hace daño, y yo no estoy allí, no podré soportarlo.
-Tendré todo el cuidado del mundo, amor.
-Más te vale. Tengo ganas de verte ¿sabes?- suspira, cambiando de tema.
-Yo también... pero aún nos quedan varios meses.
-Ya... bueno. Lo conseguiremos, pequeña.- susurra él.- ¿Estás nerviosa?
-¿Por qué voy a estarlo?- pregunto, extrañada.
-Tu cumpleaños es en quince días.
Paro en seco, y lo pienso. Es verdad. El 16 de Marzo cumplo 18 años.
-No me acordaba.- me río con fuerza.
-Tu falta de memoria es preocupante.- se burla él.
-Imbécil.
-Me quieres.
-Subnormal.
-Me amas, Angie.
-Tonto.
-Te diría "calla y bésame" si estuviera a tu lado.- susurra él. Yo sonrío, como una tonta.
-Ójala pudiera.-
-Podrás.- susurra él, de nuevo.- Te quiero.
-Te quiero más, Harold.
-Bobadas. Tengo que colgar ¿vale? Mándame WhatsApps, y llámame cuando quieras.
-Vale... te quiero.
-Yo también, pequeña.- dice él, y hace el sonido de un beso. Luego, cuelga. Cuelgo yo también, y miro a Kris, que asiente.
-Ya está.
-Es lo que tenías que hacer, Angie.
-¿Eso es que me perdonas?- digo, esperanzada.
-No. Me has mentido sobre algo que era importante.-dice ella, mirando al suelo.- Eso duele ¿sabes?
Luego se levanta, pasa a mi lado, sube las escaleras y se mete en su cuarto.
Que difícil es todo esto.

Dos días más tarde. 
Los días en casa son insoportables. Kris y yo no hablamos, sigue enfadada conmigo y ya ni sé como decirle que lo siento. Creo que no quiere oír mis disculpas.
Estoy preparando mi cena, ya que ni cenamos juntas tan siquiera. Mientras corto una zanahoria en tiras para echarla a la sartén dónde estoy salteando varias verduras, suena mi móvil que está en una estantería de la cocina. Sigo moviendo las verduras con una espátula de madera, y alargo el brazo para cogerlo. En mi móvil brilla una foto de Fredo, y su nombre encima. Descuelgo deslizando el dedo por la pantalla.
-¡Hola, Fredo!- digo, sonriente.
-Angie...- dice él, con la voz apagada. No es su voz habitual, que suele ser feliz.
-¿Qué pasa?- pregunto, preocupada.
Él suspira.
-Justin ha tenido una parada respiratoria en el concierto de hoy. Ha acabado el concierto y ahora está en el hospital, se ha desmayado en el coche mientras lo llevábamos a urgencias...- me informa.- Lo digo por si... quizás quiera que estés ahí al despertar... y ya sé que eso es malo para ti por Harry, pero Justin está mal... y...-
Fredo parece preocupado, así que apago la sartén, y dejo que se enfríe.
-Tranquilízate antes de que te de a ti un ataque de pánico, Fredo.- digo, autoritaria.- ¿En qué hospital está?
-¿Eso es que vienes... a pesar de que...?- dice él.
-Si, Fredo, voy para allá si me dices en que hospital está.- digo, con impaciencia.
-En el hospital Wellington. Habitación 133.
-Voy para allá.
Cuelgo, y meto las verduras en un tupper en la nevera. Subo hasta el vestidor, y cojo: http://www.polyvore.com/let_you_know_that_youre/set?id=77633705. Kris se asoma de su habitación al oír el estruendo.
-¿Qué pasa?
-Justin ha tenido una parada respiratoria, voy al hospital.- digo, haciéndome un moño, y cogiendo una cazadora. No le dejo hablar más, salgo corriendo hasta la entrada, y cojo un taxi que pasa por la puerta de casa. Le indico la dirección, y espero impaciente hasta que llegamos. Casi me tiro del taxi en marcha.
Entro al hospital, y pregunto donde está la habitación 133. Una enfermera me explica dónde está, al verme tan apurada, y yo salgo corriendo a pesar de las quejas de algunos pacientes en los pasillos. Llego a la habitación, donde está todo el equipo en la puerta. Pattie me abraza, sollozando, y yo la consuelo con prisa.
-Entra... a él le gustará verte cuando despierte.- dice ella. Asiento, saludo a los demás, y entro en la habitación. Ahí está él, tumbado en la cama, con una pantalla que indica como late su corazón. Me quito la cazadora, y la dejo sin cuidado sobre una silla. Me acerco a la cama, y suspiro.
-Hay que ver que sustos me das, Bieber.
Le cojo la mano, y la dejo entre las mías.
-Todo esto es un lío ¿sabes? Kris está enfadada conmigo porque fui a tu cumpleaños, porque dice que eso es malo para mi relación con Harry. Pero hablé con él el otro día, y me dijo que no pasaba nada. Que no le importaba.- bufo.- ¿Por qué no podéis llevaros bien, joder? Todo sería más fácil para mi.
Miro al suelo, intentando no llorar. Esto me supera. Mi mejor amiga no me habla, uno de mis mejores amigos ha tenido una parada respiratoria, y mi otro mejor amigo, Niall, está con mi novio en Estados Unidos. Todo va genial, vamos.
-Sabes que Styles no me cae bien. Es algo que no puedo evitar.- dice una voz, ronca y burlona, desde la cama. Levanto la cabeza, rápidamente, y veo a Justin con los ojos abiertos, y con una sonrisa sarcástica en los labios. Sonrío, y me tiro encima de él, abrazándole.
-¡Me has dado un susto enorme, asqueroso!- le regaño, conteniendo las lágrimas de felicidad. Él ríe, y me pasa la mano por el pelo.
-Como si fuera mi culpa que mi cuerpo no quisiera que yo respirara.- dice, en voz baja.
-Es tu culpa, Justin.- digo, separándome ligeramente de él. Él frunce el ceño, confuso.- Tienes que parar. Así como vas, no vas bien.
-¿Qué quieres decir?
-Que esto te está superando.
-No me está superando.- murmura él, molesto.
-Justin, por favor. Esto es peligroso para ti. Has tenido una parada respiratoria en pleno concierto, y los médicos dicen que es por estrés. Tienes que relajarte.
-¿Y cómo sugieres que lo haga, Angie?- gruñe él.- Tengo una gira mundial por delante.
-Acaba la gira, hasta donde tengas programado, que es hasta Estocolmo, el 22 de Abril ¿no?- pregunto, y él asiente.- Luego, tómate un tiempo lejos de todo. Lejos de las fans. Tiempo para ti y tu familia. Con Jaxon y Jazz. Escribe canciones, relájate. Y luego, vuelve. Vuelve y te garantizo que será una vuelta increíble. Todo el mundo estará expectante esperando a que vuelvas.-
Él parece pensativo, y luego me mira, sincero.
-Voy a hablarlo con Scooter.
-Eso es lo que quería oír.- sonrío.- Ahora, voy a avisarles de que has despertado...
Antes de que pueda irme, él me agarra del brazo, y me mantiene a su lado.
-Si quieres que haga una pausa en mi fama, y que me relaje, voy a pedirte una cosa.- dice, con la voz ronca. Le miro raro ¿a mi? ¿Qué va a pedirme a mi?
-¿Qué?
-Mis próximos conciertos después de Londres son en España. 14 y 16 de Marzo. Sé que es tu cumpleaños, y quizás es mucho pedir, pero ven conmigo. Tu me mantienes con los pies en la tierra, Angie.-
-Justin, yo... yo no sé...
-Hablaré personalmente con Harry, si quieres, y le contaré todo.- sugiere él.
-No... no. Ya se lo diré yo.
-¿Eso es que vas a venir?- dice, sonriente.
-Me lo tengo que pensar, es algo complicado. Pero si tu dices que me necesitas... soy tu amiga, así que posiblemente vaya.- digo yo. Él sonríe y me abraza. En ese momento, Fredo, Ryan, Scooter, Pattie y varios más entran en la habitación, sonrientes. Justin levanta la vista, y mira a Scooter.
-Angie y yo tenemos un trato.- anuncia.
-¿Vais a casaros?- pregunta Ryan, burlón. Justin le mira mal, pero él sigue riendo.
-Angie me ha dicho que quizás necesite una pausa. Me ha sugerido hacer todos los conciertos, hasta Estocolmo, que es el último programado, y  luego tomarme un tiempo con mi familia. Relajarme, escribir canciones, y luego volver.- explica Justin. Luego mira a Scooter.- ¿Qué te parece?
-Bueno, hay que mirarlo, pero desde luego es una idea muy madura y muy bien pensada.- dice Scooter, sonriéndome.- Bien hecho, Angie.
-¿Y qué te ha prometido ella a cambio de que te tomes ese descanso?- pregunta Pattie, con curiosidad.
-Va a venir a España conmigo, a los conciertos que hay programados allí.
Todos aplauden, sonrientes. Fredo se acerca a mi, y me susurra.
-Eres la mejor, Angie. Gracias por darle otra oportunidad, él la necesitaba. Él te necesita.-
¿Y qué pasaría si yo necesitara también a Justin?

Gracias por estar aquí un capítulo más. Sin ti, si, persona que lee esto, esta novela nunca hubiera estado aquí. Quizás ni la hubiera escrito. No tendría ni 10 capítulos. 
Por cierto, tengo una cuenta de twitter de mis dos novelas, 'And she will be loved' y  'Show me what you're all about'. Si leéis las novelas, seguidme en esa cuenta <3 

1.4.13

And she will be loved, capítulo adicional.


(Este capítulo no guarda relación cronológica con el 41, es decir, no va después del 41. Es después de que se vayan los chicos, pero no se sabe exactamente cuando. Disfrutad, y por cierto, he empezado otra novela, se llama Show me what you're all about.)
P.D: Ya sé que la de la foto es Perrie, pero no encontraba fotos de Zayn con otra (o no me apetecía buscar)

-Angie-
Mi móvil comienza a sonar, asustándome y haciendo que tire al suelo una pila de camisetas muy bien planchadas y dobladas. Mierda. Corro hasta mi cuarto, y veo que tengo un WhatsApp de Zayn. ¿Zayn? ¿Qué querrá Zayn?
Z: Angie, tengo que hablar contigo. Conéctate a skype, porfa xxx.
A: Ahora mismo, Bradford Bad Boy xxx
Enciendo el Mac, y espero impacientemente a que se cargue. A las milésimas de conectarme al skype, un pitido me avisa de la llamada entrante de Zayn. Descuelgo, y la imagen de Zayn ocupa mi pantalla.
-¡Hola Angie!- sonríe él, y yo le saludo con la mano.
-¡Hoooola Zayn! ¿Qué tal todo? ¿Qué pasa?
-Todo muy bien. Necesito tu ayuda y consejo.- me confiesa.
-¿En qué?
-He conocido a una chica...
-¿A una chica? ¿Y Perrie?- pregunto yo, sorprendida.
-No tiene nada que ver con Perrie. Esta chica es... distinta. Fue todo una casualidad, y eso me hace agarrarme a ella como si fuera a desaparecer tan fácilmente como apareció. 
-¿Y como la conociste?- pregunto, interesada.

-Narrador-
Los chicos de One Direction acaban el concierto muy satisfechos. Entran en el backstage, felicitándose unos a otros, y riendo. Louis y Niall se van a por algo de comer, Harry y Liam cogen sus móviles para llamar a sus chicas, o al menos mandarles un mensaje. Entretanto Zayn se va al camerino, dispuesto a cambiarse, está muy cansado. Camina hasta la puerta silbando, pero algo interrumpe su melodía. Oye un ruido en el camerino, como si alguien caminara por dentro. Para, y pega la oreja a la puerta. Hay alguien dentro de su camerino. Agarra el pomo, y lo empuja con fuerza, abriendo la puerta, colándose dentro de la habitación, y cerrando tras él.
-¡VOY A LLAMAR A SEGURIDAD!- grita. Una chica morena, con el pelo corto, y los ojillos brillantes pega un salto cuando él entra de esas maneras. Se tapa la boca, asombrada.
-¡No, por favor! Oh dios mío, eres Zayn Malik... Pero no me delates por favor.- dice ella, con voz suave. La chica es bastante guapa. Muy guapa. No le recuerda a nadie que haya visto, recordaría a alguien como ella. Aunque hay algo en la chica que le atrae, se recuerda a sí mismo que la chica está en su camerino, y no debería estar allí. Puede que incluso sea un delito.
-¿Qué demonios haces aquí?- pregunta, algo brusco. Ella baja la cabeza, y pasan unos segundos hasta que Zayn se da cuenta de que está llorando.- Eh, cielo... No llores. Pero entiendes que no deberías estar aquí, me has dado un susto enorme. Quizás si me explicas que haces aquí, pueda entenderlo.
Ella solloza, y se seca las lágrimas.
-Soy de un pueblo lejos de todo, y llevo ahorrando para un concierto vuestro desde que os vi en The X Factor. Supe que teníais algo especial. En mi familia no sobra el dinero, he tenido que vender mi móvil y varias antigüedades de mi casa sin que mis padres lo sepan para pagar una entrada. Llevo varias semanas haciendo cola, para poder estar en primera fila, y ver a las personas que me hacen la vida un poquito más fácil: vosotros. Pero me han robado la entrada, había gente desesperada por entrar, y supongo que mientras dormía me la robaron. He conseguido colarme, no me preguntes como porque ni yo lo sé, y he entrado por la ventana al camerino, para ver si podía al menos veros, y deciros todo lo que siento, y lo muy agradecida que estoy. Cuando entraba por la ventana, me he resbalado y me he hecho esto.- dice ella, y señala una herida bastante fea en su brazo.
-Pero ¿no te has parado a pensar lo mal que podías acabar?- dice Zayn, conmovido por la historia.
-¿Peor aún?- dice ella, con voz débil.- No podía soportar la idea de no veros.
Zayn decide abrazarla, porque ve que ella llora de nuevo.
-Bueno, tranquila. Ya estás aquí, ya no pasa nada. Todo está bien. No llores más, por favor.
-¿No vas... a delatarme?- dice ella, entre sollozos.
-No. Les diré a los chicos que te encontré fuera, o algo así.
-¡Gracias!- chilla ella, y le besa la mejilla. A Zayn se le escapa una sonrisilla.
-No hay de qué... Eh... ¿Cómo te llamas?
-Samantha. Bueno, Sam.- dice ella, sonriente.
-No hay de qué, Sam.- dice él.- Ahora, vamos a curarte esa herida.
Mientras le cura el brazo, se da cuenta que entre esa chica y él está surgiendo algo. Algo muy fuerte que no sabe si va a poder controlar. Algo que Zayn nunca antes había sentido.

-Angie-
Sonrío, emocionada con la historia.
-¿Y ahora? 
-Ahora... hablo con ella por WhatsApp.- dice él, sonrojándose.
-No la dejes ir. Te lo digo como se lo dije a Liam. Si tú crees que merece la pena, vuelve a por ella, antes de que sea demasiado tarde.
-Iré a por ella en cuanto pueda.- afirma Zayn.- Gracias, Angie. Tenía que contarle esto a alguien. Ahora, te dejo con alguien que quiere hablar contigo.-
Zayn se retira de la silla en la que está sentado, y la cámara enfoca a la pared de detrás, donde hay un cuadro. Supongo que estarán en un hotel. Los ojos deslumbrantes de mi novio me devuelven a la realidad.
-¡Hola, pequeña!- dice él, sonriente.
-¡Harry!- exclamo yo, sonriente.
-Quiero enseñarte algo, ¿vale? Sube el volumen del ordenador a lo máximo, anda.
Obedezco, y le hago una seña cuando estoy lista. Se oye a Niall detrás tocando la guitarra, lo sé porque se ríe antes de empezar. Harry empieza a cantar Wish U Were Here de Cody Simpson en acústico.
 Lately I got this feeling
I don't know what's the meaning
But I know strong
And it's over you
All I want is to be home with you.
Al ritmo de Cody Simpson, mi novio hace que lo sienta muy cerca a pesar de los kilómetros que nos separan. Me hace recordar lo mucho que le quiero, lo mucho que voy a esperarle, y lo mucho que daría por él.