24.6.13

And she will be loved, chapter 54.

-Justin-
Llegamos a casa después de que Usher y Ella hayan conseguido separarme del cristal de la UCI. La imagen de Angie en esa cama, tan frágil, con tantos cables me persigue. Pero sé que estará bien. Confío en ella.
Ella me conduce a la habitación de Angie, y antes de irse me besa la frente con cariño y me sonríe.
-Intenta descansar algo, Justin. Mañana iremos a verla ¿vale?
-Muchas gracias, Ella. Descansad vosotros también.- le respondo, con una sonrisa. Cierra la puerta detrás de ella, y yo me dedico a mirar las estanterías de Angie, repletas de libros: 'Hush Hush', 'Querido John', 'Perdona si te llamo amor', '50 sombras de Grey', 'Los Juegos del Hambre', 'Harry Potter', 'El lado explosivo de Jude' 'Rompiendo las normas' 'Agua para elefantes'... Los ojeo todos, hasta llegar a un libro antiguo, con unas letras doradas en el lomo que dicen 'Álbum.' Lo saco con cuidado y lo llevo hasta la cama, dónde me siento y lo abro.
Me sumerjo en la infancia, adolescencia y en general, la vida de Angie. Angie de bebé, de niña, con Hayley, con Kris, con los chicos de 1D, con famosos como Taylor Swift, Lady Gaga, Jessie J, Bruno Mars o Matt Bellamy... En la última página hay una foto vieja, hecha con una Polaroid. En ella, sale un hombre sujetando a Angie de bebé. Debajo, con una caligrafía curvada hay escrito:
'I love you, little bird.' ('Te quiero, pajarito.)
Little bird. Pajarito. A mi cabeza viene la canción de Ed, y me apresuro en coger una de las guitarras de Angie para empezar a entonar la canción. Me ayuda muchísimo cantar, para dejar de pensar en mis problemas, en los suyos y en los nuestros.
 But if I kiss you, will your mouth read this truth?
Darling how I miss you.
Strawberries taste like lips do.
And it's not complete yet, mustn't get our feet wet
'Cause that leads to regret, diving into soon.
And I'll owe it all to you, my little bird. 
En las siguientes horas, canto varias canciones mías, de Ed, de Taylor, de Demi... hasta que el sueño me vence. Pienso y sueño con Angie, feliz de ser su razón de luchar.

-Angie-
Empiezo a recuperar la consciencia, pero no puedo abrir los ojos. Oigo una conversación muy cerca de mi.
-¿Crees que va a tardar mucho en despertarse?- susurra la voz de Justin. Sonrío para mi, le he echado de menos.
-Los médicos dijeron que no iba a tardar más de una hora, tío. Tranquilo.- contesta otra. Tardo un poco más en ubicarla, pero en seguida caigo. Es Ed, Ed Sheeran. ¿Qué hace Ed aquí? ¿Ha venido desde Londres?
-No puedo, de verdad que no. Me ha dado un susto enorme y no puedo permitir que le pase nada más.- dice Justin, suspirando. Me invade un sentimiento de culpabilidad, hasta que Ed interviene y hago lo posible por centrarme en la conversación.
-Ya sé que podemos hacer para que se despierte.
-¿El qué?
Ed le responde abriendo una cremallera. Escucho curiosa, sin terminar de entender qué ocurre. Cuchichean entre ellos, y Justin ríe. De pronto, una guitarra empieza a sonar y doy por sentado que es la de Ed. Justin empieza a cantar, con cuidado y Ed le sigue hasta que llegan al estribillo donde ambos cantan a la vez.
 And I'm right here, 
ain't nobody gotta hold you.
'Cause I'm right here, 
ain't nobody gon' control you.
'Cause I'm right, right here.
I'm right here, I'm right here, I'm right here.
Abro los ojos con lentitud y enfoco la imagen. Ambos han dejado de cantar, y me miran con una sonrisa.
-Bienvenida de nuevo, amor.- me dice Justin, acercándose a la cama y besándome la frente.- ¿Cómo te encuentras?
Le dirijo una sonrisa débil, y le miro a los ojos.
-Creo que bien... sólo me duele un poco el costado.- digo, haciendo una mueca. Los recuerdos de cómo me hice esa herida son confusos, pero sé perfectamente por qué lo hice y quién fue el culpable.
-Has sido muy fuerte, Angie.- dice él, acariciándome la mejilla.- Estoy tan orgulloso...
Yo le dirijo una sonrisa y luego aparto la mirada para mirar a Ed, que me sonríe con timidez.
-Hola, Ed.
-Hola, cielo.- me responde y Justin se aparta para dejarle pasar. Me coge una mano y suspira.- Nos has dado un susto... Pero bueno, lo importante es que ya estás bien.-
-¿Nos? ¿Has venido con más gente desde Londres?- pregunto, con la voz ahogada. Rezo para que Harry no esté aquí.
"Por favor, que no esté. Por favor, que no esté. Por favor, por favor, por favor..."
-He venido con Kris, Liam y Louis. Además están aquí dos chicas más...- me explica Ed.
-Hayley y Lis.- completa Justin, sonriéndome. Parece estar radiante.
En un momento de silencio incómodo, irrumpen en la habitación cinco personas.
-¡ANGIE!- chillan los cinco a la vez, aunque el que destaca por encima de todos es Louis.
-¡Dios mío!- exclama Kris, aliviada y acercándose a la cama.- ¿Estás bien? ¡Dime que estás bien, por favor!
-Estoy bien, estoy bien.- río con ganas.
-¡MI ÍDOLA ESTÁ VIVA!- chilla Louis, reventándome los tímpanos a mi y a todos los presentes.
-¡Cariño!- grita Hayley, y se abre paso para abrazarme.- ¡Vaya reencuentro más genial!
-Genialísimo.- recalco yo, con sarcasmo.
Liam y Lis se me tiran encima también, haciéndome reír. Todos se reúnen alrededor de la cama al final, mirándome.
-Yo propongo una matanza a ese capullo psicópata.- propone Kris, recibiendo un codazo de Liam para que se calle.- ¿Qué? ¡Es la verdad!
-Yo me apunto a la matanza.- dice Justin, que me acaricia el pelo.
-¡Yo también! Puedo hacer de Chucky "el muñeco diabólico" y doy muy mal rollo.- apunta Ed, quitándole hierro al asunto y arrancándonos alguna carcajada.
-A mi lo de la sangre no me va, lo siento.- dice Lis, riendo.
-A mi tampoco, así que me quedo contigo.- oigo decir a Louis.- Eres Lis ¿verdad? Creo que no nos conocemos...
-Bueno, yo sé que tu eres Louis Tomlinson y eres un componente de One Direction.- dice mi prima, con una sonrisa.- Y sé que estás con Eleanor Calder.
-Todos tus datos son correctos menos uno.- dice Louis, y continúa sin perder la sonrisa.- Ya no estoy con Eleanor...-
-Oh... eh... Lo siento.- dice mi prima, sin saber dónde meterse.
-Tranquila, no lo sientas.- sonríe él.
Ambos se sonríen, dando por finalizada la conversación y centran su atención en mi.
-Gracias a todos por venir, de verdad.- digo yo, con una sonrisa débil.
Todos los presentes me sonríen, y luego empezamos a hablar. Hacen turnos para hacerme compañía e ir a comer. Estoy un rato con cada uno de ellos y lo agradezco mucho. Kris me cuenta lo bien que va su relación con Liam y me obliga a contarle todo sobre Justin y yo. Liam me habla de la gira, de Kris y llama a Niall por teléfono para que hable con él. Louis me hace reír hasta que me duelen las costillas y ambos nos preocupamos por si me he hecho daño. Lis me cuenta que va a irse a vivir a Londres para empezar Química en la Universidad y me pide permiso para instalarse en mi piso con Kris. Ed me enseña a tocar The A Team con la guitarra y me hace sonreír porque me nota un poco depresiva. Paso un rato con mi madre y Usher, que se dedican a preocuparse y a abrazarme cada dos por tres.
Por la noche, me dejan sola con Justin, que se empeña en pasar la noche en el sillón que está a mi lado. Cuando acabo la inmunda comida que el hospital me da, decido contarle a mi novio lo que me lleva rondando la cabeza todo el día.
-Justin...- le llamo con suavidad. Él aparta de inmediato la mirada del móvil, y me coge la mano entre las suyas.
-Dime, amor.
-Tengo... que contarte algo.- digo, con lentitud. Él me mira preocupado y asiente, indicándome que empiece.- He vuelto por ti.
-¿Cómo es eso?- pregunta, confundido.- Volver ¿de dónde?
Mierda. Esto es muy difícil de contar sin que parezca que estoy loca.
-A ver, prométeme que no vas a pensar que estoy loca.- le ruego.
-Está bien.- dice él, conteniendo la risa.
-Justin, esto es serio.
-Lo siento, amor. Cuéntame.
-Cuando estuve inconsciente tras la operación, vi a mi padre. Estuve con él en una casa a la que solía ir con mi madre y él cuando no tenía ni siquiera un año. Me dijo que tenía la opción de quedarme ahí con él y morir... o volver aquí, contigo. Elegí volver aquí.- lo suelto todo de un tirón, y observo como me mira, perplejo.
-¿Me elegiste a mi... antes que a tu padre?- pregunta. Sus labios empiezan a curvarse en una sonrisa.
-Sí.
-Joder, Angie.- murmura, y hace una maniobra para abrazarme sin hacerme daño, escondiendo la cabeza en mi cuello.- No... no sé que decir.
-No digas nada, por favor.- susurro. Él levanta la mirada y yo me hundo en sus malditos ojos marrones.- Sólo bésame, por favor.
Él obedece sin rechistar, y me acoge en sus brazos como si fuera una pieza de porcelana. Me besa con suavidad, con calma. Tengo que reprimirme para no soltar un suspiro de alivio, necesitaba ese beso desde que le elegí a él antes que a mi padre. Me va recostando en la cama de hospital, poniéndose encima de mi sin apoyarse, intentando no hacerme daño. Te quiero, me susurra unas mil veces. Yo no puedo parar de sonreír, con cada beso me asegura un poco más que he hecho bien quedándome con él.
Tras una sesión de besos, abrazos y sonrisas de esas suyas que me gustan tanto, se separa y se recuesta a mi lado.
-Te quiero tanto...- suspiro yo, recorriéndole las facciones con el dedo.
-El sentimiento es mutuo, amor.
Río ante su particular manera de decir 'yo también', antes de quedarme profundamente dormida.

¿Quién nos iba a decir a ambos que tras haber burlado a la muerte, nos esperaba una prueba de fuego que nos haría elegir? Ninguno de los dos se lo hubiera esperado.

Sé que el capítulo es muuuuuy corto, pero no me da tiempo de más, y el wi-fi canadiense es una mierda ._. Intentaré subir lo antes que pueda, porque ideas  para escribir me sobran :3 
¡Gracias por leer! xx.

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