4.9.13

And she will be loved, chapter 63.

Antes de empezar este capítulo, quiero dedicar unas líneas a 'This Is Us.' Ha sido una PASADA de película, pero tranquilas, no hablaré de lo que sale por respeto a las que no lo habéis visto. Me ha inspirado muchísimo, ver a los chicos hablar como personas normales, como jóvenes normales. Verlos sonreír como si estuvieran a dos centímetros de mi. He llorado, he gritado y me he sentido más cerca que nunca de ellos.
Por eso, gracias. Gracias por TIU, chicos. Ha sido increíble, no puedo dejar de pensar en todo lo que he visto en 90 minutos. Ha sido como pasar una tarde con vosotros.


-Angie-
Troceo con tranquilidad los ingredientes que voy a echar en la ensalada que pienso comer. Sola, por cierto. Liam y Kris están de fin de semana romántico en un hotel de lujo cerca de Dover, mientras que Lis y Louis se han ido al cine, y supongo que luego cenarán juntos. La sonrisa de mi prima al entrar el otro día a casa fue un espectáculo. Nos contó que Louis le había confesado que estaba enamorado de ella al ritmo de They Don't Know About Us, y que luego se habían besado. No la veía tan feliz desde hacía tiempo. Luego yo les conté mi incidente con Harry, y ellas parecieron alegrarse. No entendí exactamente el motivo de su alegría, pero entre ellas no había más que sonrisitas y codazos poco disimulados. No hay quien las entienda...
Tarareo distraídamente el estribillo de Hey There Delilah mientras aliño la ensalada y la sirvo en un elegante bol de cristal que no sé exactamente de dónde ha salido. Me siento en la mesa de la cocina y me como la ensalada mientras miro el reloj de la pared de enfrente. Desde que besé a Harry, los días pasan lentos, y las agujas del reloj parecen querer fastidiarme yendo con más lentitud. Pero mi actitud es clara, y sé lo que siento: No quiero nada más allá de una amistad con Harry. Solo amigos, solo amigos.
"O eso es lo que tú te crees, Farrell." sisea mi conciencia, negando con la cabeza. Ruedo los ojos mientras sigo preguntándome si es normal que mi conciencia me sermonee. Sigo masticando la lechuga mecánicamente, mirando el reloj y preguntándome sin querer admitirlo que estará haciendo él ahora mismo.

-Harry-
Saco el sándwich de la sartén y suspiro. No tengo hambre, no sé ni para qué me hago algo de comer. No soy como Niall, que puede comer a cualquier hora y todo le entra. Mi estómago está bastante bien educado, y protesta de hambre en los momentos adecuados, no a todas horas.
Me siento en la mesa de la cocina, solo. Muchos días alguno de los chicos me acompaña a la hora de comer, pero hoy todos tenían algo que hacer: Louis se ha ido al cine con Lis, y luego quería llevarla a cenar. Liam y Kris están de días de pareja romántica en un hotel de lujo... y no saben la envidia que les tengo. Niall ha ido a comer con su hermano, que está en Londres de paso. Zayn está ocupadísimo grafiteando las paredes de su cuarto, y no tiene pausa ni para comer. Ed no está en Londres... y no tengo mucha gente más a la que llamar. Odio la palabra, pero lo de ser 'famoso' tiene pocas ventajas en lo que se refiere a las amistades. No puedes fiarte de mucha gente.
Mastico como una máquina el sándwich mientras miro el reloj. ¿Por qué desde que ella se fue parece que todos los relojes se han parado? Desde que dijo ese "solo amigos" parece que el tiempo no pasa para mi, me niego a aceptar que todo se haya quedado allí. No quiero que el tiempo siga pasando, y que tenga que darme cuenta que puede que la haya perdido dejándola ir el otro día. Pero en realidad... ¿qué otras opciones tenía? ¿Salir detrás de ella, y rogarle de rodillas que me diera otra oportunidad? Eso hubiera sido ridículo.
Desbloqueo mi iPhone, y sin saber cómo acabo en el contacto de 'Angie'. Observo su foto, sale con una preciosa sonrisa y los ojos brillantes. Es guapísima, pero no me enamoré de ella por eso. Me enamoré de su forma de ser, de su mal genio por las mañanas, sus besos a media tarde. Me enamoré de ella en las noches en vela en las que no hacía otra cosa que verla dormir preguntándome como algo tan pequeño podía ser tan grande para mi. Que tiempos aquellos, ¿no? Creíamos que lo nuestro era para siempre. Hasta yo, el que jamás se ha fiado del amor, creí que lo nuestro nunca acabaría. Lo irónico fue que yo lo acabé. No creo que nunca lo perdone.
Y así como así, estoy marcando el teléfono de Angie.

-Angie-
 Just a small town girl, livin' in al lonely world, she took the midnight train goin' anywhere...
La versión de Glee de Don't Stop Believin' me saca de mi trance y casi me tira de la silla. No por los agudos increíbles de Lea Michele, si no por que la foto de Harry está en mi pantalla como señal de que me está llamando.
Y sin saber cómo, pulso el botón verde y descuelgo. Me llevo el móvil a la oreja lentamente, y oigo su voz grave, que me pone toda la carne de gallina y me saca una sonrisa tonta que no consigo retener.
-No hables. Sólo escucha.- dice, rápidamente.- Siento lo que pasó el otro día... o quizás no lo siento tanto ¿tú sabes las ganas que tenía de besarte? ¡No me cuelgues, en realidad esta conversación no va por ese camino. Quiero invitarte a cenar, Angie. Sin compromisos. Puedes ir con tu sudadera de Obey si así estás cómoda. Solo quiero que salgamos a cenar como amigos, quiero que todo vuelva a ser como antes de que saliéramos. Quiero esa confianza que teníamos de vuelta...- coge aire, y después de unos instantes callado continúa.- ¿Qué dices?
-Está bien. Pasa a buscarme a las ocho y media.- digo, con una sonrisa tonta y acto seguido le cuelgo.
No tengo ni idea de que he hecho... ¿pero qué más dará?
Paso la tarde dando vueltas por casa y saltando como un ganso, estoy demasiado nerviosa aunque solo sea una cena como amigos. Pero es con Harry Styles. Mi deber como mujer es estar nerviosa. Y son tantos los nervios, que empiezo a prepararme dos horas antes del evento en si. Revuelvo todo mi armario de arriba a abajo, dejando una montañita de ropa a mi lado, y me desespero una y otra vez. La duda que más atormenta a las mujeres de nuestro siglo empieza a rondar con mi cabeza como una mosca, como una amenaza: ¿Qué-me-pongo? Ni siquiera sé dónde piensa llevarme Harry. Venciendo todo mi orgullo, cojo mi móvil y marco su número.
-¿Angie?
-Sí. Hay un problema.
-¿Te has arrepentido de lo de la cena?- ríe él.
-No, no es eso. ¿A dónde piensas llevarme, qué me pongo?
-Te he dicho que podías ponerte tu sudadera de Obey si estabas más cómoda, o si no, un vestido digno de los Óscars. Estarás preciosa de cualquier forma.
Dicho esto, va el ricitos este y me cuelga. Suelto un gruñido de desesperación y vuelvo a mirar mi armario, intentando averiguar que puedo ponerme que sea un punto medio entre "tu sudadera de Obey y un vestido digno de los Óscars." Pienso matarlo con mi modelo, porque no se lo va a esperar. ¿Espera en serio que salga a cenar con uno de los hombres más atractivos en el panorama musical, y vaya de sudadera? Ah no, perdona. De pequeña gané el premio a la niña con más estilo de preescolar, así que algo debe de quedarme.
Me pongo: http://www.polyvore.com/youve_got_that_smile_only/set?id=78096462, me cepillo el pelo y me maquillo. Cojo mi bolso y meto un jersey por si acaso, mi móvil y poco más.
¡RIIIIIIIIIIIIIIIIIIIING!
Miro el reloj asombrada, son ya las 8:05. Bajo las escaleras corriendo e intentando no matarme con los tacones, cruzo el pasillo casi derrapando, me echo un último vistazo en el espejo de la entrada, me coloco en frente de la puerta, respiro y...
-Hola.- intento sonar casual y despreocupada, aunque lo único que consigo es que se note que he bajado corriendo las escaleras. Él suelta una risita que se corta en cuanto ve mi atuendo. . Angie 1, Harry 0.
-Eso... no es tu sudadera de Obey.- dice él, sin molestarse en disimular que me mira de arriba a abajo.
-Ya...- digo cerrando la puerta detrás de mi y quedándome a inevitable poca distancia de él.- Pero tampoco es "un vestido digno de los Óscars." Es un punto medio.
Lo miro a él, y veo que va con una americana y una camiseta con un dibujo que no acierto a ver. Lleva sus inseparables Converse blancas bajas, lo que me provoca una sonrisa. ¿Cuántos pares debe tener este hombre?
-¿Vamos?- pregunta, tendiéndome el brazo.
-Vamos.- respondo, desdoblándole el brazo y cogiendo su mano.
 
Ninguno de los dos sabe que nos espera en esta noche, que va a estar llena de sorpresas y contratiempos.
¿Habrá final feliz?

Bueno, pues espero que os haya gustado este capítulo cortiiito. Primero, que sepáis que quería subirlo ayer, pero estuve enferma y nada. Segundo, #prayforandy y recordaros que Liam es un héroe. Estoy orgullosa de él. Tercero, hay una encuesta en la que os pregunto qué novela queréis que empiece al acabar esta, está en la columna derecha, ¡votad! Cuarto: INFINITAS GRACIAS POR LAS 5000 VISTAS, SHAWTIES <3
Os quiero mucho x.

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