14.2.13

And she will be loved, chapter 29.


-Angie-
Cuando despierto, estoy en una habitación que no me suena de nada. Me encuentro tumbada en una cama de matrimonio, en una habitación azul, con muchísimos CD's, y fotos. Me levanto, con cuidado, y me doy cuenta de que llevo mi pijama. No recuerdo habérmelo puesto, ni siquiera recuerdo como he llegado hasta aquí. Miro las fotos que hay en las paredes, y sonrío al instante. Estoy en la casa de Harry. En todas sus fotos sale él. Con los chicos de One Direction, con sus amigos de aquí, o con su familia. Me gustan sobre todo las fotos que tienen de The X Factor, todos los chicos parecen mucho más jóvenes. Tienen una foto preciosa, en la escalera de los video-diarios, todos sonrientes. Incluso Louis sale bien, sin hacer el tonto. Hay una foto con Louis, en la que están riéndose el uno del otro en el rodaje de Live While We're Young. Sonrío emocionada al ver varias fotos conmigo. Una en el escenario, mientras me cantaban Kiss You. Él sale abrazándome por detrás, y yo salgo riéndome. Hay otra en el MSG, en el escenario. Cuando proclamó que estaba enamorado de mi. Salimos besándonos, es una foto preciosa. Luego hay varias fotos del M&G del MSG, con Justin. También del día que conocimos a Kristen. Distingo también una foto en la azotea, el día de la caza del tesoro. Estamos tumbados en la hierba, sonrientes y abrazados. Me acuerdo a la perfección de ese día.
Un ruido me saca de mis recuerdos. Harry acaba de entrar en la habitación con una bandeja a rebosar de comida, supongo que será el desayuno. Me sonríe, deja la bandeja encima de la cama, y me abraza por detrás mientras contempla las fotos conmigo.
-¿No debería presentarme a tus padres?- pregunto yo.- Estoy de okupa en su casa, ni siquiera saben quién soy.
Él ríe, y me besa la mejilla.
-No están, ni mi madre, ni mi padrastro, ni mi hermana. Han salido a dar una vuelta y a comprar, volverán esta tarde.
Suspiro, aliviada. Prefiero retrasar un poco lo de conocer a sus padres, me da miedo no caerles bien. Harry vuelve a reír ante mi reacción.
-¿Te alivia saber eso?- pregunta, burlándose de mi.
-Es que me da miedo no caerles bien- suspiro, mirando al suelo. Él hace que gire sobre mi misma, y coge mi cara entre sus manos.
-Pero que bobadas dices, madre mía- suspira, y pega su frente con la mía- Es imposible que les caigas mal.
-Imposible no es.
-Deja de pasarlo mal por eso.- me regaña.
-No puedo.- contesto yo.
-Si puedes.
-Que no.
-Que si.
-Que te calles.- le espeto yo.
-Que me calles tú.- me urge él. Yo suelto una risilla y le doy un besito corto en los labios. Él sonríe, y me lleva con él hacia la cama, dónde nos tumbamos y desayunamos juntos. Harry ha puesto té, tostadas, pasta, fruta, y zumo en la bandeja. Cojo con cuidado una taza de té, me sirvo azúcar, y le doy un sorbito pequeño. Él se ríe de mi.
-¡Pareces mi abuela cuando bebes té!
Le miro con asco fingido, y sigo bebiendo. Él sigue con sus risas.
-Imbécil- le suelto, y él pone una expresión de dolor.
-Eso ha dolido.
-Te fastidias.
Empieza a ponerme pucheros, y me veo obligada a besarle de nuevo para que deje de hacer el imbécil. Seguimos desayunando, y acabamos con todo el contenido de la bandeja.
-Me gustaría ducharme, amor. ¿Dónde está el baño?- pregunto.
-Ah, no sé. Soy imbécil.
Yo suelto un gemido, desesperada.
-No, Harry, por Dios. No empieces otra vez.
Él acaba riéndose, y me acompaña al baño. Me da una toalla, y se queda en el baño. Le miro raro.
-Harry, ¿qué haces?
-Podría ducharme contigo.- dice, con una sonrisa sugerente.
-No.- le digo, riendo.
-Eres mala conmigo.
-Lo sé, pero te encanta.
-La verdad es que me pone muchis...- le interrumpo, porque le empujo fuera del baño, y cierro el pestillo. Él aporrea la puerta, mientras yo empiezo a reírme.
-¡Quiero un poco de intimidad!- suplico, entre risas.
-¡No sé que es eso!
-No, si ya se nota.- río, mientras me quito el pijama y me meto en la ducha. A los minutos, él se cansa de aporrear mi puerta, y se va a saber dónde.
Me ducho con calma, y me doy cuenta que anoche me dormí sin problema en el coche, a pesar del desfase horario. Creo que después de nuestra aventura amorosa en el área de descanso abandonada, salimos a la autopista y yo me quedé dormida. Supongo que Harry me llevaría a su habitación, y me pondría el pijama.
Me ducho con tranquilidad, y al salir me doy cuenta de que no me he cogido ropa de la habitación, así que salgo simplemente tapada con la toalla hasta la habitación de Harry, que se encuentra tumbado en la cama recién hecha con el iPhone en las manos. Ya se ha vestido.
-¡PERO POR DIOS, NO ENTRES ASÍ AQUÍ QUE ME DAN GANAS DE HACERTE COSAS!-me grita, teatralmente. Yo río, y le espeto:
-¿Tu piensas en algo más a lo largo del día?
-Por supuesto.- se levanta de un salto de la cama, y se acerca a mi.- En lo mucho que te quiero, la suerte que tuve de encontrarme contigo, y en que no quiero que esto acabe jamás.
Yo suspiro, sonriente. Así es mi novio. Un pervertido, que en el fondo en un romántico sensible. Abro mi maleta, y saco: http://www.polyvore.com/winter_time/set?id=68329047 ante la atenta mirada de Harry. Le miro de nuevo.
-¿Vas a dejar de mirarme mientras intento vestirme, o aún no sabes que es la intimidad?
-¡Pero a ver! ¿Qué tienes que yo no te haya visto ya, tonta!
-Pero es que así a la luz me da corte.- susurro yo, sonrojada. Él se ríe, y asiente. Se tumba en la cama, y se gira al lado contrario de dónde estoy yo, para darme "intimidad" Me quito la toalla, y me pongo la ropa interior.
-No llevas lo que te regalé yo.- oigo, a mis espaldas, y me giro. Harry está girado, y me mira. Yo le lanzo un cojín que hay por el suelo.- Aunque ese también te queda muy bien.
Sonrío, y hago una especie de desfile de modelo por mitad de la habitación. En ropa interior.
-Deja de ser tan sexy, hazme ese favor.- susurra él.
-¿Qué prefieres, que engorde?
-Si engordas te querré igual.- sonríe él.
-¿Prefieres entonces que sea vieja?
-Cuando tu seas vieja, yo lo seré también porque envejeceremos juntos. Y me seguirás pareciendo la chica más preciosa de este mundo.
No tiene remedio. Es adorable aunque no se lo proponga. Me tiro encima de la cama y me arrastro hasta él, que me acoge en sus brazos. Nos abrazamos, y él me besa la frente. Luego, me sigo vistiendo, y dejo en gorro en la maleta, por si acaso luego salimos.
-¿Que vamos a hacer ahora?- pregunto yo.
-Quedarnos en esta cama tooooooda la vida, abrazados.
-Que romántico estás hoy- digo yo, riendo. Me tumbo en la cama a su lado, y él me abraza, como ha dicho.
-Contigo es imposible no ser romántico.
-¿Eso es bueno?
-Eso espero, amor.

-Justin-
Observo como Jason se queda dormido en mis brazos, a pesar de que acaba de despertarse. Sonrío, mirando a mi hermano con ternura, y lo dejo en el sofá. Le tapo con su manta favorita, y salgo en silencio.
Mi madre y mi abuela están en la cocina, preparando un postre. A mi abuela siempre se le han dado genial los postres. Me acerco por detrás de mi madre, y la abrazo. Se gira, y me acaricia las mejillas.
-Que mayor estas, hijo- suspira.
-Muchísimo, mamá- digo, burlándome de ella. Ambos reímos, y el timbre suena de pronto.
-Justin, ve a abrir, por favor.- me ruega mi abuela, afanada en el postre. Asiento, y salgo de la cocina, hacia las escaleras que llevan a la entrada. Abro la puerta, y dos personas se me tiran encima.
Cuando me quiero dar cuenta, estoy siendo chafado por dos chicos de mi edad. Son Ryan y Chaz, mis dos mejores amigos de toda la vida.
-¡Hola, mi amor!- me grita Chaz, y acerca sus labios a mi cara. Acto seguido empieza a reírse él solo. Ryan y yo le miramos raro, y nos abrazamos.
-Hola, Biebs. Se te echaba de menos.
-Hola, Butsy (así le llamamos, por su apellido Butler) A vosotros también.
Subimos a mi cuarto, y se sientan en mi preciosa cama recién hecha.
-¡Bestias, la acababa de hacer!- les regaño.
-Te jodes, y le rehaces.- me espeta Chaz, riendo de nuevo.
No me queda más remedio que sentarme en el suelo, ya que acaparan mi cama.
-Hace como dos mil años que no hablamos... ¿Qué tal va todo?- pregunta Ryan, sonriente.
-Eso, eh, Bieber, ¿qué tal con Angie?
Me incomoda que me pregunten por ella. Aún me acuerdo de que ella fue el motivo de una de mis peleas más fuertes con Chaz.

[FLASHBACK]
-Justin, que me da vergüenza, que no conozco de nada a tus amigos y no sé...- dice Angie, negando con la cabeza. Yo me echo a reír.
-Te van a caer genial. Además, te vas a venir conmigo a la piscina, y con ellos. No admito un no por respuesta.
Me mira con odio, y yo río. Me levanto del césped, del jardín de mis abuelos, y le ofrezco la mano. Ella la acepta, y se levanta con mi ayuda.
-Vamos, anda. Llegamos tarde.- digo, y la cojo de la mano. Cogemos las mochilas de las piscinas que están en el suelo, y antes de que pueda rechistar la agarro de la muñeca, y empiezo a correr. Salimos por la puerta de atrás, y atravesamos parte de Stratford corriendo. Oigo como ríe, detrás de mi. Llegamos jadeando a casa de Chaz. La puerta está abierta, así que pasamos al jardín. Ya se oye a Ryan y a Chaz, mis dos mejores amigos, armando jaleo en la piscina.
-¡EH, ES JUSTIN BIEBER!- grita Chaz, y sale del agua, corriendo. Se tira encima de mi, y me besuquea la cara. Le aparto de un empujón salpicado de risas, y me acerco a Ryan, con el que hago un saludo con las manos.
-Esta es Angie, tíos- anuncio, señalando a la chica que está a mi lado.
-Hola, Angie, yo soy Chaz.- sonríe Chaz, y le da un beso en la mejilla.
-Yo soy Ryan, y créeme que soy el más inteligente y normal de los tres. Por si te interesa.- dice mi otro amigo, guiñándole un ojo. Ella acoge el comentario entre risas.- ¿Cuántos años tienes, Angie?
-Quince.
-Yo dieciséis, pero supongo que la edad no importa.- ríe Chaz, y los cuatro reímos.
 Nos sentamos en el suelo, y yo hablo de hockey con Ryan, mientras Chaz y Angie hablan de otra cosa, que no llego a oír, ya que no me interesa demasiado. Oigo como se levantan, pero sigo hablando con Ryan.
Cuando giro la cabeza, veo como Chaz abraza a Angie, y la empuja a la piscina, mientras ella ríe. Se me corta la respiración, y cuando emergen, me doy cuenta de algo que me cambia por completo. Algo que va a condicionar mis sueños y mis pensamientos, por bastante tiempo.
Cuando emergen, y veo los brazos de Chaz en la cintura de ella, y los brazos de ella en los hombros de Chaz, siento que yo también quiero esa proximidad. Quiero esa proximidad con Angie, quiero que me mire como le mira a él, con algo de timidez, pero con atrevimiento también. La guinda del pastel es cuando, riendo, ella le entrega un beso en la mejilla. Mis pensamientos son como los de un niño pequeño, me gritan un "yo también quiero".
También tengo ganas de gritarle algo a Chaz.

[FIN FLASHBACK]
-Pues Angie... con Styles, y eso.- digo, intentando darle poca importancia.
-A ti Angie te gusta, Bieber. No nos engañes.- dice Ryan, con una sonrisilla maligna en la cara.
-No me gusta...- intento negar yo.
-No, tío. No le gusta, Ryan, déjale.- dice Chaz. ¿A dónde quiere llegar con esto?- ¡ESTÁ JODIDAMENTE ENAMORADO DE ELLA!-
Le lanzo un zapato en la cara, que él para con la mano. Mis mejillas sonrojadas me delatan, mientras ellos ríen.
-¿Y qué problema hay, Justin? ¡Díselo!- me dice Ryan.
-¿Tú eres tonto? ¡Está con Styles!- digo yo.
-¿Qué más dará eso? ¡Es cuestión de conquistarla, y ya se olvidará de el ricitos!- chilla Chaz. Ryan asiente.
-Pero es que él va un paso por delante.- suspiro yo.
-¿A qué te refieres? ¿Se han acostado?- pregunta Ryan. Yo asiento.- Bueno, tampoco es para tanto, Bieber.
-Era la primera vez de Angie.
Ryan y Chaz hacen una mueca, y suspiran.
-Entonces lo tienes un poco difícil, Justin... Pero nada es imposible.

1 comentario:

  1. madre mia aver si es verdad y justin se decide y conquista a angie jeje siento no aver comentado antes pero como ya te dije solo tengo internet los findes subeeeee pronto cielo

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